La evolución en el Universo toma muchos caminos, pero todos los caminos que toma la vida corpórea requiere el consumo de otra materia viva. Se puede argumentar que las plantas y las criaturas unicelulares viven absorbiendo solo luz y productos químicos, y por tanto se sostienen a sí mismas de una manera benigna, pero un examen mas cercano prueba lo contrario. Las bacterias o el material de los virus se considera que están en la frontera de la materia viva, infectando y destruyendo lo que necesitan para nutrirse, y las amebas y protozoos además rodean y consumen los comestibles que encuentran, esté o no vivo ese alimento. Las plantas parece que asimilan dióxido de carbono y luz y lo transforman en azúcar. Pero las raíces de las plantas atrapan los nutrientes que necesitan las plantas solamente porque están embebidas en el suelo humedecido por el subproducto de otras vidas, los cuales deben morir para que la planta crezca, y algunas plantas carnívoras no esperan a que muera el donante.
En la base de la vida de planetas los sembrados con AND son simples reacciones químicas las que forman estructuras mas complejas y se replican a sí mismas. Los que se replican con éxito llegan a ser los genes del futuro, y los que no, permanecen como bloques constructivos para las cadenas de ADN con mas éxito. Comerse unos a otros comienza pronto. Los comportamientos carnívoros solo ocurren en la vida corpórea al contrario que en los reinos espirituales, donde el consumo de un espíritu por medio de otro nunca es necesario y de hecho nunca ocurre. No se sabe por qué Dios ha estructurado de esta manera el mundo, pero considerando que todas las entidades formadas comienzan sus vidas encarnadas, hay ciertas lecciones que son garantizadas. Así como la empatía en algún grado es algo intrínseco a la vida corporal, se da un conflicto entre la personalidad y el otro. Por tanto, la decisión consciente de sacrificar la personalidad, es realizada frecuentemente, y esta es la chispa que comienza el desarrollo hacia la orientación al Servicio-A-Otros.